Anomalías de Presión
Deficiencias que se producen en el trazo, que pueden estar ocasionadas por patologías físicas, psíquicas o por emociones momentáneas intensas.
Para evaluarlas correctamente, deben analizarse escritos anteriores y se recomienda hacer un seguimiento posterior, para ver la evolución.
Las Torsiones: la escritura sufre una doble desviación
El Brizado: corte o rotura repentina del trazado
Los Temblores: las lineas se "quiebran"
Las Congestiones: exceso de entintamiento, empastamientos.
Los Cortes: la escritura se rompe
Congestiones y cortes: se producen juntos
Los puntos innecesarios
Los retoques: corrección posterior a la letra escrita
Deficiencias más comunes
La relación existente entre Grafología y la imagen corporal - a mi humilde entender - está absolutamente perimida. En este "recorte epistemológico" que está viviendo actualmente la psicología de la escritura el cuadro de la letra "f" con sus correspondientes áreas es algo ya superado. Los grandes avances en grafopatología muestran que el cuadro es totalmente desinformante.
ResponderEliminarAfectuosamente,
Julio Cavalli*
Los grafólogos - por lo menos en la Argentina - fascinan por la Grafopatología. Esto es, por un lado, algo muy positivo, pero por otro lado... da un poco de miedo.
ResponderEliminarFundamento mi postura. Durante mucho tiempo la grafología sirvió para que aquellas personas que no pudieron, por diferentes motivos, acceder a una carrera médica o paramédica, se refugiaran en la grafología como un mecanismo compensatorio de metas no cumplidas: poder decir "pacientes", "terapia", etc... no solo indicaba un marketing en torno a la persona sino también - como decía Foucault - poder. "Te dejo porque tengo que ver un paciente", daba a entender que la persona era médica... nadie iba a pensar que era un técnico no univeristario. Los que trabajan en grafoterapia, muchas veces - no separan este campo y utilizan el término "paciente".
Por otro lado hay grafólogos que desean trabajar a conciencia como "grafopatólogos" delimitando su campo: técnicos, auxiliares de la medicina. Lamentablemente, son los menos.
En este "desenfreno" por acumular conocimientos grafopatológicos (dejo la interpretación del porqué abierta) el alumno o el grafólogo ya recibido busca "facilismos". El cuadro de la relación imagen corporal-escritura, ayuda a este facilismo. Y una enfermedad se ve en todo grafismo a través de "síndromes" y no a través de un sistema mecanicista más cercano a Michon que a Serratrice y Habib.
Es fundamental realizar un recorte epistemológico. Una ruptura -como señala Bachelard. Superar aquellos conocimientos que ya no se ajustan a una época. Y no seguir poniendo vino nuevo en odres viejos.
Si seguimos dando como válidas teorías obsoletas jamás lograremos un consenso científico coherente y creíble.
Y si los grafólogos siguen usando palabras reservadas al campo de la medicina como "pacientes" y "terapia" será mejor que tiremos la toalla y les demos la razón a los agrios positivistas que pululan con sus absurdas fundamentaciones en la red.
Un abrazo,
Julio Cavalli*